Bueno, para ir calentando motores de cara al curso de verano, que empezará el próximo día 13 de Agosto, vamos a ir contando lo acontecido los últimos días del curso pasado.
Las últimas crónicas relataron los exámenes de primer Kyu de nuestros compañeros Alexandra y Sergio durante el entrenamiento cojunto de Junio (crónica pinchando aquí), así como la inauguración de la exposición de nuestra compañera Alexandra (crónica aquí), de la cual os adjuntamos el vídeo, por si alguno no pudo ir a la expo.
Así pues, el pasado día 13, además de la cena de fin de curso, tuvimos exámenes de 4º Kyu de nuestros compañeros Maite, Eduardo, Ismael y Juan Carlos. Los respectivos ukes fueron: Gorka, Sergio, Manolo y Javier Ruiz. Juntando la cena por un lado, y los exámenes por otro, no podía ser de otro modo, vino a dar la clase Javier Zubieta, para también examinar a los esforzados compañeros, y como remate, asistir a la frugal cena (cocinando los cárnicos como es costumbre).
Al comienzo de la clase Javier Zubieta hizo entrega de la hakama que guardaba para nuestro compañero Sergio desde que éste comenzara a practicar Aikido bajo la tutela de Javier, por la amistad que siempre les ha unido como vecinos de Villava.
Tras unas pocas técnicas para entrar en calor se pasó a realizar los exámenes de nuestros compañeros. Tanto los examinados como los ukes hicieron muy bien su trabajo y se pudieron ver cuatro buenos examenes de 4º Kyu. Gracias a las labores de reportera de nuestra compañera Elena podemos ilustrar esta crónica con unas imágenes para disfrute de nuestros lectores :)
Tras los examenes, un poquito de práctica otra vez, para terminar de hacer hueco para lo que estábamos a punto de engullir. Al acabar la clase, todos a la sociedad el Bolón a preparar la cena. La cena transcurrió como de costumbre, con muy buen ambiente, y muy buenos alimentos. Quizás no se contaron tantos chistes como en otras ocasiones, pero no por eso hubo menos risas.
Al terminar, tras el postre, hubo un pequeño sorteo en el que no quedo comensal sin recibir un obsequio, cada cual con su valor material o efímero, pero todos ellos con encanto. Cabe destacar que el premio "gordo" del sorteo, una paletilla de ibérico, fue a parar a Elena, quien a pesar de que su dieta le impedía ingerir el alimento en esos días no tuvo problemas en tener que esperar un poco para degustarlo. En "declaraciones" posteriores pareció haber disfrutado del premio con todo rigor. Cómo no, ahí van algunas fotillos del evento.
Y para terminar, algunos campeones estiraron un poco la celebración tomando un par de copas en torno a profundas reflexiones sobre el devenir de la humanidad :)